Bedaziluá lii

Bedaziluá lii
Me acordé de ti, te recordé

viernes, 30 de septiembre de 2011

El otoño

El otoño es de nosotros, podemos guardarlo al lado de las llaves que ya no usamos. Ponerlo cerca de la ventana para que espíe el mejor momento del cielo. Y de las nubes. Ahí quedara llenándose de herrumbre, sepia y olvido. Un día aspirara el aire melancólico y gris vencido, tomara su vestido de hojas y nervaduras y afincará cerca de los periódicos junto al kiosco. Se acomodará al lado de esos seres llenos de tiempo ido, de tiempo soñado. Buscara el olor de los besos dados por primera vez, ondeara cerca de las nervaduras de ese árbol castaño, buscara entonces tus manos. El abrigo de tus manos para llegar a ese instante en que un solo de violín hechizo tu corazón de una vez y para siempre. Sabrás entonces que el otoño despierta los pájaros de tarde en tarde para recordarte que no hay mejor vuelo que el de la despedida y no hay mejor beso que el del regreso.

Gab Martínez

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Para un Epitafio


Para un epitafio

De la hierba a la ceniza 
del breve jardín alemán 
un viento de invierno  
acaso lejano 
unas simples palabras: 
apenas vivo, muerto entre libros 
y poemas que no salvan 
aquí yace y tan lejos

queda 
la sombra

de la Amada 
luego los mismos pasos 
que se alejan

por la senda 
de grava

tan callando 
y sucede otra vez

la ronda de los gatos 
silenciosos

y aun después 
un velo de nubes

más oscuras 
en el cielo

de toda intemperie 
Alejandro Drewes